La activa participación de los estudiantes en estas jornadas fomenta su pensamiento crítico y analítico. Al mismo tiempo, los estudiantes aprenden a plantear preguntas, buscar respuestas, analizar datos y presentar sus conclusiones de manera coherente.

La investigación impulsa la innovación y el progreso en diversas disciplinas. Los estudiantes que participan en la investigación contribuyen al avance del conocimiento y pueden desarrollar soluciones a problemas actuales.

Las habilidades adquiridas a través de la investigación, como la gestión de proyectos, la comunicación efectiva y el trabajo en equipo, son altamente valoradas en el mercado laboral. Los estudiantes se preparan mejor para su futuro desempeño profesional y para una mayor contribución a la sociedad al abordar desafíos sociales, económicos, de salud y ambientales, cuya solución es vital para la elevación de la calidad de vida. 

La investigación permite a los estudiantes explorar áreas de interés profundo, fomentando una actitud de aprendizaje continuo y pasión por el descubrimiento.

En resumen, la formación científica investigativa no solo enriquece el aprendizaje de los estudiantes, sino que también tiene un impacto duradero en la sociedad y en el avance del conocimiento en general.